La Atención Temprana es el conjunto de acciones coordinadas con carácter global e interdisciplinar, planificadas de forma sistemática y dirigidas al niño de 0 a 6 años con alteraciones en el desarrollo o riesgo de padecerlas, a su familia y a su entorno. Estas acciones, preventivas, estarán encaminadas a facilitar su evolución en todas las facetas, respetando el propio ritmo y fundamentando la intervención en los aspectos relacionales, lúdicos y funcionales.
La Atención Temprana es una disciplina joven y está en constante evolución. En las última décadas, en este campo, se está viviendo un cambio de paradigma; eso es, se está produciendo un acercamiento a la utilización de Prácticas Centradas en la Familia, en su entorno natural, frente al tradicional tratamiento ambulatorio.
Desde el nacimiento de esta disciplina, en los años 60 en Estados Unidos, el eje de intervención era el niño y el rol del profesional como experto, mientras que la familia tenía un rol pasivo. Pronto, con los avances de las ciencias sociales, de la educación, la salud y la psicología, los programas centrados en el desarrollo del niño han dado paso a un abordaje Centrado en la Familia y en entornos naturales, reflejando una clara evolución de un modelo médico a un modelo psicosocial. Por lo tanto, se ha evidenciado, que es una mala praxis dejar al margen a la familia y se la ha incorporado al modelo de Atención Temprana.
Por lo tanto, las nuevas perspectivas en la Atención Temprana contemplan:
• La necesidad de profundizar en modalidades de intervención en entornos naturales, así como, en actualizar y mejorar la calidad de las distintas intervenciones a realizar con la familia del niño.
• Replantear y explicitar objetivos de intervención hacia la familia, orientados a satisfacer sus necesidades.
• El esfuerzo por reforzar la capacidad de la familia para el manejo de fuentes de estrés y la toma de decisiones.
• El imperativo de alejarse de los Tratamientos ambulatorios del Profesional sobre el niño hacia una mirada del profesional dando apoyo a los cuidadores principales e incorporando intervenciones en las actividades diarias y rutinas del entorno natural.
¿En qué necesidades se basa la Atención Temprana con enfoque en PCF?
La Atención Temprana con enfoque de Prácticas Centradas en la Familia, se basa en la evidencia científica de que el Desarrollo Infantil Temprano (etapa de la vida desde la gestación hasta los 6 años), es el periodo durante la cual se sientan las bases del desarrollo cognitivo, lenguaje, motor y socioemocional de los niños. Estos años son cruciales para asegurar el aprendizaje y una buena salud.
Los primeros años representan una ventana de oportunidades únicas para la inversión en el capital humano. La evidencia muestra que las experiencias e intervenciones en los primeros años perduran a lo largo de la vida. Por lo tanto, las intervenciones que promueven el desarrollo durante los primeros años favorecen la equidad y generan beneficios económicos mucho mayores que sus costos.
Por otra parte, la Atención Temprana con enfoque de PCF se basa en que:
• El niño aprende en la vida cotidiana y de las experiencias diarias, en sus casas con sus padres o cuidadores principales.
• Las primeras experiencias afectan el desarrollo de la arquitectura del cerebro y proporcionan la base para todo un futuro aprendizaje, comportamiento y salud.
• En entornos naturales el niño tiene oportunidades de hacer y practicar. La mayor parte de sinaptogénesis se produce cuando el propio Sistema Nervioso Central (SNC) dirige la interacción con el medio. Para ello los cuidadores deben ser competentes, promover escenarios ricos y variados, desarrollar habilidades sociales que permitan la generalización.
• El niño aprende en actividades significativas y que pueden ser repetitivas pero funcionales. Con experiencias reiterativas guiadas por su propia iniciativa o la de un adulto significativo.
• La familia es el contexto central y debe ser el eje de la intervención.
• El fortalecimiento de la familia permite mejorar la calidad de vida familiar, el apego seguro y el bienestar general del niño.
¿Cuál es el objetivo del programa?
¿En qué comprende?
El programa comprende de cuatro instancias al mes:
– La primera semana se realiza la visita al hogar: el Especialista Único visita la casa del niño o lugar donde él se desarrolla.
– La segunda y tercera semana se realiza una visita institucional: el niño/a viene con el cuidador a las instalaciones de FASINARM para realizar las intervenciones.
– La cuarta semana se realiza un encuentro familiar: se identifica una necesidad de las familias y se invita un experto para que realice una charla o un encuentro en el cual comparten entre las familias pertenecientes al programa de PCF, este evento es lúdico y estructurado por el Especialista Único.