Estos juguetes, con cuatro presentaciones, se comercializan en más de 20 países en el presente.
La fabricación del juguete suele modernizarse con el paso de los tiempos y ante las metamorfosis de las convenciones sociales. Con mayor frecuencia se admiten mayores dinámicas pedagógicas en la primera infancia como puntos destacados para la formación y el desarrollo de los seres humanos.
Un buen incentivo creativo, o cuanto menos un recado positivo e inclusivo para los niños y niñas, hacen que un juguete pueda tornarse en una herramienta para la promoción de valores.
Este es el caso particular de las muñecas que, rompiendo esquemas con su presentación, han llegado a más de 30 países. El repetitivo retrato figurativo de la muñeca ‘perfecta’ se ha adaptado con el paso del tiempo y, ahora, la sensación del mercado se enfoca en unas muñecas con rasgos de síndrome de Down.
Promoción de la diversidad y la inclusión
Las muñecas con Síndrome de Down fueron conceptualizadas en la juguetería Miniland, de la ciudad de Onil, en Alicante (España).
Según el sitio web oficial de la empresa, estos juguetes vienen en 4 diseños, siendo dos de ‘origen’ caucásico y dos de raza negra.
Vale destacar que estos nuevos juguetes se originan de una línea con la cual la empresa busca fomentar la diversidad y la inclusión. En el pasado reciente, Miniland había fabricado muñecas con diversidad racial y, desde finales de 2019, les apostó a los muñecos con Síndrome de Down.
La adopción en los hogares de estos juguetes fue sensacional a principios del año 2020.
Además, el medio español ‘Nius’, reportó que las muñecas con Síndrome de Down se introdujeron en una feria alemana de juguetes, sin embargo, tan solo semanas después el covid-19 fue declarado como una pandemia y en varios países –sobre todo en España, uno de los más golpeados durante los primeros meses del año pasado– se tomaron medidas restrictivas que impidieron ejercer algunos trabajos no esenciales durante un tiempo.
Eso sí: la presentación en la feria alemana funcionó, pues los pedidos no se hicieron esperar. Miniland adecuó sus espacios para la producción ‘biosegura’ de las muñecas.
Y él éxito de la modesta juguetería de Alicante llegó a su punto más alto cuando, en octubre del año pasado, las muñecas con Síndrome de Down fueron escogidas como el mejor juguete de 2020 por la Asociación Española de Fabricante de Juguetes.
“Tenemos una gran presencia en jardines de infancia y somos muy conocidos por maestros y educadores. Con esta colección nos hemos podido dar más a conocer al público en general”, indicó Victoria Orruño, la directora de marketing de Miniland, en conversación con ‘Nius’.
Orruño, además, aseguró que, de los 30 países en los cuales se distribuyen las muñecas, Estados Unidos y Australia son los ‘máximos compradores’.
“Hay que recordar que los muñecos están destinados a todo tipo de niños, porque a través del juego podemos mostrarles que hay otros niños que no son como ellos y ayudar a la inclusión y la normalización de otras realidades”, puntualizó la directora de marketing.