Las personas en algún momento tenemos la necesidad de ser autónomos para realizar algunas actividades o acciones. Es por eso que desde niños nos vamos preparando para lograr esos objetivos.

A lo largo del camino necesitamos la ayuda de nuestros padres, familia y educadores, ya que ellos nos dan las pautas y nos acompañan en nuestros primeros recorridos… ¿recuerdan quién los acompañó en sus primeros pasos, o quien los impulsó cuando estaban aprendiendo a manejar bicicleta?, alguien de su familia verdad? … quizás papá o mamá.

Ustedes se preguntaran por qué menciono mucho a la familia en este tema de autonomía., la razón es muy simple, los padres son los primeros educadores, y ellos son los responsables de hacer partícipes a sus hijos en los procesos de aprendizaje. El desarrollo de la autonomía debe ser el fin de la educación, según Piaget (1948).

Pero qué pasa cuando somos padres de un niño con síndrome de Down y se nos hace tan difícil no sobreproteger, y la mayor parte del tiempo pensamos o decimos: no quiero que haga eso porque se puede caer, se va a golpear o puede ser tan difícil para él. Está bien que los cuidemos, pero también tenemos que pensar que ese niño necesita aprender, y que al sobreproteger estamos limitando a nuestro hijo a realizar actividades que favorecen su desarrollo y autonomía. Confíen en sus hijos y en ustedes como padres, lo pueden hacer y lo van a lograr.

Aquí les dejamos algunas actividades que pueden hacer con sus hijos para favorecer su autonomía:
● Vestirse solo y que ellos elijan su ropa
● Bañarse y lavarse los dientes solo
● Comer
● Preparar un sándwich
● Dormir en su habitación
● Ordenar sus juguetes
● Poner su ropa sucia en el cesto
● Ordenar sus materiales de estudio
● Preparar su mochila
● Pedirles ayuda al momento de buscar las cosas en el supermercado

Estas son algunas de las actividades que pueden hacer los niños para desarrollar la autonomía, además de brindarles seguridad, darles la oportunidad de tomar decisiones, y ofrecerles responsabilidades de acuerdo a su edad. Estos 3 puntos son importantes y hay que tenerlos en cuenta en el proceso de aprendizaje, en el momento que los padres le brindan seguridad a sus hijos para realizar alguna actividad, ellos se sienten confiados y quizá se equivoquen en los primeros intentos, pero como tienen la confianza de sus padres lo seguirán intentando hasta lograrlo.

También se mencionó que debemos darles la oportunidad que ellos tomen decisiones, claro está que estas son de acuerdo a su edad, estas decisiones pueden ser que escoja su ropa con la que va a salir, o que decida qué quiere comer al momento de pedir algo fuera de casa, etc. Por último, ofrecerle responsabilidades de acuerdo a su edad, la autonomía se empieza a desarrollar desde pequeños y se va formando a lo largo de la vida, recuerden padres que ustedes son los primeros educadores de sus hijos y que su casa es el mejor entorno para aprender.

“Cuando un niño se siente seguro de sí mismo, deja de buscar aprobación en cada paso que da” (Maria Montessori)

Lic. Paulina Ávila Buele
Docente Inicial 1B

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